El francés Alain Laboile se define a sí mismo como fotógrafo y padre de seis hijos. Un dato, este último, curioso si no precisamos que este escultor de profesión ha construido su mayor y más completo proyecto artístico en torno a su propia familia; una serie de altísimo peso sentimental e increíble calidad técnica.
Su pasión por la documentación fotográfica llegó de la manera más casual, tras adquirir una cámara para realizar su portfolio de escultura. Pronto empezó a dirigir su objetivo hacia aquello que le rodeaba, construyendo en el proceso un homenaje a la vida familiar, al misterio de lo cotidiano y la magia que esconden las escenas más naturales. En sus propias palabras, es un legado que le ofrece a sus hijos, lanzando al mismo tiempo una invitación al espectador para que reflexione sobre su niñez, un concepto universal y atemporal.
A continuación, una selección de las instantáneas más potentes:
Queremos conocerte mejor... »